Cinco señales de alerta que indican que su red wifi ha sido ‘secuestrada’ por ciberdelincuentes

Los dispositivos tecnológicos se han convertido en un blanco frecuente de ataque por parte de delincuentes informáticos que buscan obtener datos personales con fines ilícitos, especialmente para llevar a cabo una variedad de delitos, como fraudes, suplantación de identidad, extorsión, estafas, entre otros.

En este contexto, no solo los teléfonos móviles y los computadores son objetivos de los criminales, sino que los routers wifi se han transformado en un blanco principal para estos ataques.

Mediante astutas maniobras, los delincuentes logran hackear redes domésticas con el objetivo de aprovecharse de ellas, lo que representa un grave riesgo para la seguridad y la integridad de todos los miembros de la familia.

Ante esta problemática, resulta crucial que los usuarios se mantengan alertas a las siguientes señales, que pueden indicar que su red wifi ha sido intervenida por ciberdelincuentes:

• Presencia de dispositivos desconocidos: Una de las señales más evidentes de que una red wifi ha sido hackeada es la aparición de dispositivos no reconocidos conectados a ella. Muchos routers permiten monitorear los equipos que están conectados en tiempo real a través de su interfaz de administración.
• Consumo excesivo de ancho de banda: Los atacantes pueden estar utilizando el ancho de banda de la red para realizar actividades como la descarga de archivos pesados, streaming o, incluso, actividades ilegales, lo que repercute en el rendimiento general de la red.
• Notificaciones extrañas: Si se empiezan a recibir alertas o mensajes inusuales en los dispositivos, como notificaciones de acceso no autorizado o intentos fallidos de iniciar sesión en la red, esto puede ser un indicio de que alguien está intentando hackear la red wifi.
• Problemas de conexión recurrentes: Si los aparatos que usualmente se conectan sin problema a la red wifi comienzan a experimentar desconexiones frecuentes o errores de conectividad, es posible que un atacante esté interfiriendo en la señal con el fin de ralentizar o interrumpir el servicio.
• Accesos no autorizados a cuentas en línea: La aparición de accesos no autorizados en cuentas de correo electrónico, redes sociales o cuentas bancarias puede ser una señal clara de que los hackers están monitoreando la actividad en línea del usuario o sustrayendo información sensible. En tales casos, es altamente recomendable cambiar las contraseñas de las cuentas afectadas de inmediato.

El hecho de que un delincuente logre infiltrarse en la red de esta manera pone en riesgo los datos personales de los usuarios. A través de este acceso, los ciberdelincuentes consiguen contraseñas, correos electrónicos, contactos y claves bancarias, lo que les permite ejecutar acciones fraudulentas sin ser detectados.

Para prevenir este tipo de delitos, es imperativo adoptar medidas que resguarden la información almacenada en los dispositivos conectados a la red wifi:

• Es fundamental elegir una contraseña segura, que combine letras, números y símbolos, para dificultar el acceso no autorizado.
• Apagar y reiniciar el router puede desconectar a los intrusos y restablecer algunas configuraciones.
• Revisar si el router tiene actualizaciones de seguridad disponibles, ya que los fabricantes suelen lanzar parches para corregir vulnerabilidades conocidas.
• En caso de que el router lo permita, se aconseja activar el cifrado WPA3 para mejorar la seguridad de la red.
• Desactivar cualquier función que permita el acceso remoto al router, salvo que sea estrictamente necesario.
• Si se reciben visitas frecuentes, crear una red wifi separada para ellos, de modo que no puedan acceder a los dispositivos principales de la red doméstica.

Adoptando estas medidas de seguridad, los usuarios pueden reducir significativamente los riesgos de ser víctimas de ciberdelitos relacionados con el hackeo de redes wifi.